Seguramente habrás visto en varias publicaciones ciertas estadísticas que refieren al uso de distintas redes sociales. El origen de estos análisis, cada vez más útiles, se remonta a casi diez años. Comenzada la década del 2010, una vez que Facebook se instaló completamente en Latinoamérica, comenzó a cobrar peso un concepto que hasta entonces se ligaba solamente al desarrollo de software tradicional: “el algoritmo”. Entender lo que esto significaba (y, desde luego, su funcionamiento), abrió un abanico literalmente infinito de posibilidades para una agencia de redes sociales.
La hasta entonces reciente empresa de Mark Zuckerberg vio su nacimiento con Facesmash. Y su objetivo era completamente diferente al que hoy todos conocemos. El paso del tiempo, habiendo atravesado una fuerte metamorfosis (y varios problemas legales), le dio inicio a la empresa que al día de hoy lidera la industria tech junto a Microsoft, Apple, Amazon y Google. Finalmente, entre los años 2006 y 2008, se instaló definitivamente en América Latina. Y su expansión no terminó allí, pues ahora Instagram, así como WhatsApp son parte de la empresa y al día de hoy, la mitad de la población mundial utiliza redes sociales.
Desde luego, tamaña innovación llevó a una reformulación casi completa de las estructuras de negocio que conocíamos. ¿Cómo podría el mercado quedarse de brazos cruzados viendo que se avecinaba una ola de inversiones, comparada solamente a la de una nueva revolución industrial? Así fue como el marketing digital dio paso a su insignia estrella del siglo XXI: la Agencia de Redes Sociales.
Las empresas empezaron a ganar dinero
Conforme pasaron los años, Facebook fue perfeccionándose y surgieron muchas otras redes sociales que se volvieron populares entre los usuarios y, como ya mencionamos, algunas de éstas fueron adquiridas por Facebook. Cada una de ellas fue desarrollando y mejorando su propio algoritmo para llegar a convertirse en lo que hoy todos conocemos. El gran cambio llegó con la recaudación y, mayormente, con la administración de dinero que estas empresas generaban.
Google y Google Ads
Con Google y la incorporación de Google Ads, todas las empresas y negocios que querían mejorar sus ingresos, debían adentrarse al mundo digital con una nueva perspectiva: entendiendo el algoritmo que cada red manejaba.
Es que en un principio parecía sencillo. Solo era necesario contar con un usuario y contraseña para comenzar a publicar estados, videos o fotografías. Pero conforme pasó el tiempo, el trabajo se volvió más complejo. Cuando las redes ofrecieron el servicio de publicidad de pago, la mayoría de las empresas (aquellas que decidieron hacer bien las cosas), delegaron esa tarea en una agencia de redes sociales.
La metamorfosis de social media
Si te preguntáramos cuáles son las redes sociales que existen, la respuesta sería casi obvia: Facebook, Instagram, Twitter, Whatsapp, Linkedin, Youtube, Tik Tok, Telegram y alguna que otra extra. Lo cierto es que son muchas más.
Varias de ellas quedaron en el olvido por la “baja” densidad de usuarios activos. Incluso podríamos contarte que las principalmente activas son más de veinte. Aquí te va un detalle: muchas no son tomadas en cuenta en el colectivo de usuarios sub 40 porque no incluyen publicidad paga (y es lógico, las empresas que triunfan son las que ganan dinero). Y un dato no menor al respecto: muchas empresas comenzaron a perder dinero por no entender el funcionamiento de las redes sociales más importantes.
Por otra parte, el simple hecho de no financiarse con dinero de usuarios que se promocionan a sí mismos, automáticamente las corrió de lugar dando paso a industrias prácticamente inconmensurables. En enero de 2021, Statista publicó el ranking con la cantidad de usuarios activos por millón en las distintas redes, y los números dejan mucho que pensar.
Al respecto del manejo de social media:
1) Linkedin: fundada en el año 2002. En 2008 ya contaba con más de 25 millones de usuarios registrados. Y en 2011 se convirtió en la primera red social estadounidense en cotizar en bolsa. Estamos en el año 2021 y todavía hay gerentes que insisten en utilizarla como si fuera Facebook.
2) Facebook: en el año 2018, la lista Fortune 500 la ubicó en el puesto 76 de las compañías más grandes en Estados Unidos por ingresos, mayormente atraídos por publicidad (en 2017 los datos determinaron que ganó USD $S20.21 por usuario por publicidad. Estamos en el año 2021 y todavía hay usuarios que venden sus productos o servicios con imágenes de pésima calidad e incluso ocultando precios.
3) Instagram: su flujo de caja está directamente relacionado al de Facebook. Por lo cual vamos a encararlo por otro lado: los seguidores. El afán de aumentar los ingresos puede llegar a ofuscar a cualquiera, el problema es cuando “cualquiera” es el gerente de una gran empresa o el dueño de un emprendimiento sumamente pequeño. Desde el año 2013 a la fecha tuvo lugar un boom de compra de seguidores (en sus inicios, bots; al día de hoy, “reales”). Estamos en el año 2021 y todavía hay usuarios que perdieron absolutamente todas sus cuentas por una estafa de phishing por haber dado sus datos a un desconocido que le ofreció aumentar sus seguidores por una suma importante de dinero.
4) Twitter: este caso es bastante particular. Twitter nació como una red hecha para que las personas dejen sus pensamientos o comentarios breves sobre cualquier tema, casi sin ningún tipo de regulación más que la de los propios usuarios. Esto llevó a que, en varias ocasiones, un simple comentario se convierta en una guerra sin cuartel de la cual ni los comercios ni las empresas quedan exentos. Estamos en el año 2021 y todavía hay empresas cuyos community managers borran las publicaciones “fallidas”. No están preparados para el manejo de situaciones de crisis.
Como viste, Linkedin, Facebook, Instagram y Twitter son mundos que van mucho más allá de un simple post. Lo mismo ocurre con Whatsapp e incluso Youtube.
Para encarar un trabajo de excelente calidad en todos ellos somos la agencia de redes sociales que necesitas. Incluso contamos con el apoyo de una agencia digital de las más reconocidas en todo latam: Cubosweb
Una agencia de redes sociales puede levantar una empresa
Te proponemos la siguiente pregunta ¿con cuántos diseñadores gráficos, analistas de marketing, community managers y social media managers cuenta una empresa? Como mínimo uno por tarea, ¿verdad? Ahora pensemos: por el ejemplo dado, una empresa promedio debería contar como mínimo con 4 de estos empleados referidos cada uno a su área. ¿No sería más rentable invertir ese dinero en una agencia de redes sociales?
Vamos a encarar el ejemplo desde el lado del trabajador y del empleador. El primero sabe que cuenta como bolsa de trabajo con una cantidad enorme de agencias para ofrecer sus servicios. Por eso, lo primero que hará será dejar allí su portafolio. El segundo deberá invertir su dinero correctamente para alcanzar los objetivos propuestos, ¿quién mejor que una agencia de redes sociales para ubicar los excelentes talentos que Latinoamérica ofrece?
Entonces, ¿cómo puede ayudar una agencia de redes sociales?
El problema de la mayoría de las empresas no es que “nadie les compre” o que “vendan poco”. Es que están buscando la respuesta mágica a la pregunta equivocada en el lugar incorrecto. Lo que necesitan es publicar posts con la regularidad exacta según la audiencia y sus necesidades. Debes realizar un research y análisis exhaustivos de todo aquello que está imperando en tu mercado. Debes optimizar todos los procesos necesarios para mostrar tu mejor versión, eso incluye diseño gráfico, programación de publicaciones en fechas estratégicas, generar contenido digital estratégico y de calidad, estar constantemente a la vanguardia de los cambios en todos los algoritmos de todas las redes.
Y para eso estamos nosotros.